miércoles, 26 de junio de 2013

El Papa instituye una Comisión Pontificia para el "Banco" del Vaticano, el IOR

   


El Papa Francisco instituyó una Comisión Pontificia Referente sobre el Instituto para las Obras de Religión (IOR), que tendrá que estudiar el funcionamiento institucional del llamado "Banco del Vaticano", a fin de que cumpla con el espíritu para el que fue creado y para que impregne también los principios del Evangelio a "las actividades de carácter económico y financiero".

"La Comisión tiene como objetivo recoger información sobre el funcionamiento del Instituto y presentar los resultados al Santo Padre", se subraya en la comunicación de la Secretaría de Estado.

Integran ese organismo el Cardenal Raffaele Farina, presidente; el Cardenal Jean-Louis Pierre Tauran, miembro; el Obispo Juan Ignacio Arrieta Ochoa de Chinchetru, coordinador; Monseñor Peter Bryan Wells, secretario y la profesora Mary Ann Glendon, miembro.

La Secretaría de Estado emitió esta mañana el siguiente comunicado:

"El Santo Padre ha nombrado una Comisión Pontificia Referente sobre el Instituto para las Obras de Religión con un Quirógrafo del 24 de junio.

Como se puede ver en el texto del quirógrafo publicado hoy (que aparece lineas abajo), la oportunidad de establecer una Comisión Referente, ha surgido del deseo del Santo Padre de conocer mejor la posición jurídica y las actividades del Instituto para permitir una mejor armonización del mismo con la misión de la Iglesia universal y de la Sede Apostólica, en el contexto más amplio de las reformas que sean oportunas realizar por parte de las Instituciones que prestan ayuda a la Sede Apostólica.

La Comisión tiene como objetivo recoger información sobre el funcionamiento del Instituto y presentar los resultados al Santo Padre.

Como se especifica en el Quirógrafo, durante el periodo de trabajo de la Comisión, el Instituto sigue funcionando de acuerdo al Quirógrafo de 1990 que lo erigió, salvo otras disposiciones del Santo Padre.

La finalidad y las competencias de la Comisión se describen con más detalle en el mismo quirógrafo.

Los miembros de la Comisión son el cardenal Raffaele Farina, Presidente; el cardenal Jean-Louis Pierre Tauran, Miembro; el obispo Juan Ignacio Arrieta Ochoa de Chinchetru, Coordinador; monseñor Peter Bryan Wells, Secretario y la profesora Mary Ann Glendon, Miembro.

La Comisión inicia su trabajo en estos días.

El Santo Padre desea una colaboración feliz y productiva entre la Comisión y el Instituto".

Texto papal

"Con quirógrafo del 1 de marzo de 1990, el beato Juan Pablo II erigió con personalidad jurídica pública el Instituto para las Obras de Religión, dando una nueva configuración al Instituto y conservando su nombre y su propósito.

En la misma perspectiva, teniendo en cuenta que él quería adecuar mejor las estructuras y actividades del Instituto a las necesidades de los tiempos; siguiendo la invitación de nuestro predecesor Benedicto XVI para que los principios del Evangelio impregnen también las actividades de carácter económico y financiero; después de haber escuchado la opinión de varioscardenales y otros hermanos en el episcopado, así como otros colaboradores, y a la luz de la necesidad de introducir reformas en las instituciones que prestan ayuda a la Sede Apostólica,

Hemos decidido establecer una Comisión Referente sobre el Instituto para las Obras de Religión que recoja información precisa sobre la situación jurídica y las diversas actividades del Instituto a fin de permitir, en caso necesario, una mayor armonización del mismo con la misión universal de la Sede Apostólica. La Comisión lleva a cabo sus funciones en virtud del presente Quirógrafo y de Nuestras disposiciones operativas.

1. La Comisión estará integrada por un mínimo de cinco miembros, entre ellos un Presidente, que es el representante legal, un Coordinador que tiene poderes ordinarios de delegado y actúa en nombre y por cuenta de la Comisión para la recopilación de los documentos, datos e informaciones necesarias, así como de un Secretario, que ayuda a los miembros y custodia los actos.

2. La Comisión dispone de poderes y facultades adecuadas para el desempeño de sus funciones institucionales dentro de los límites establecidos por el presente Quirógrafo y por las normas del sistema jurídico. La Comisión recopila documentos, datos e informaciones necesarias para el desempeño de sus funciones institucionales. El secreto de oficio y las otras eventuales restricciones establecidas por el sistema jurídico no inhiben o limitan el acceso de la Comisión a los documentos, datos e informaciones, con sujeción a las normas que protegen la autonomía e independencia de las Autoridades que desempeñan actividades de vigilancia y regulación del Instituto, que se mantendrán en vigor.

3. La Comisión está dotada de los recursos humanos y materiales adecuados a sus funciones institucionales. En el caso de que fuera útil se avale de colaboradores y consultores.

4. El gobierno del Instituto continúa operando bajo la norma del Quirógrafo que lo erige, salvo cualquier diversa disposición Nuestra.

5. La Comisión recurre a la cooperación voluntaria de los órganos del Instituto y de todo su personal. Además, los Superiores, miembros y funcionarios de los dicasterios de la Curia Romana y de los otros organismos relacionados con ella, así como del Estado de la Ciudad del Vaticano, cooperan igualmente con la Comisión. La Comisión utiliza también la colaboración de terceros, ya sea espontáneamente o por encargo.

6. La Comisión Nos mantendrá informados de sus actividades en el curso de su trabajo.

7. La Comisión Nos entregará los resultados de su trabajo, así como todo su archivo, en el momento oportuno, al final de sus trabajos.

8. Las actividades de la Comisión inician a partir de la fecha de este Quirógrafo.

9. Se anunciará la disolución de la Comisión.

Dado en el Vaticano, el 24 de junio 2013, primer año de mi Pontificado".

Audiencia general ¿Somos piedras vivas o piedras cansadas, aburridas e indiferentes?, cuestiona el Papa

                                      


El Papa Francisco dedicó su catequesis de hoy a reflexionar sobre la Iglesia como el Espíritu Santo y cuestionó a todos: "¿somos piedras vivas o, por el contrario, somos, por así decirlo, piedras cansadas, aburridas, indiferentes?"

Así lo dijo el Santo Padre ante miles de fieles presentes en la Plaza de San Pedro esta mañana ante quienes preguntó: "¿cómo vivimos nuestro ser Iglesia? ¿Somos piedras vivas o, por el contrario, somos, por así decir, piedras cansadas, aburridas, indiferentes? ¿Han visto qué cosa más fea es un cristiano cansado, aburrido o indiferente? El cristiano tiene que estar vivo y alegre de ser cristiano; deber vivir esta belleza de formar parte del Pueblo de Dios que es la Iglesia".

El Papa Francisco cuestionó luego "¿nos abrimos a la acción del Espíritu Santo para ser parte activa de nuestra comunidad o nos cerramos en nosotros mismos diciendo: "tengo tantas cosas que hacer, y no es mi obligación?"

Retomando la reflexión sobre la Iglesia como el templo, el Papa dijo que esta palabra "nos hace pensar en un edificio, en una construcción; a muchos en el gran templo de Salomón en Jerusalén que era el lugar de encuentro con Dios en la oración y que custodiaba el Arca de la Alianza en cuyo interior estaban las Tablas de la Ley, el maná del desierto y la vara de Arón".

"Una llamada al hecho de que Dios había estado siempre dentro de la historia de su pueblo, había acompañado su camino y guiado sus pasos...También nosotros cuando vamos al templo debemos recordar... nuestra historia... cómo Jesús me ha encontrado, cómo ha caminado conmigo, como me ama y me bendice".

"La imagen del antiguo templo, por la fuerza del Espíritu Santo, se realiza ahora en la Iglesia como "casa de Dios", lugar de su presencia", ha explicado el Pontífice, subrayando que si el templo de Salomón estaba construido por las manos del hombre para dar una morada a Dios y ser un signo visible de su presencia entre el pueblo, con la Encarnación "es Dios mismo el que construye "su casa" para venir a habitar entre nosotros".

Francisco afirmó que "Cristo es el Templo viviente del Padre y Cristo mismo edifica su "casa espiritual", la Iglesia, hecha no de piedras materiales sino de ‘piedras vivas’ que somos nosotros...¡Qué hermoso! Nosotros somos las piedras vivas del edificio de Dios, unidas profundamente a Cristo que es la piedra que sustenta todo y también a nosotros. Esto significa que el templo somos nosotros, que nosotros somos la Iglesia viva... y cuando estamos juntos entre nosotros está también el Espíritu Santo que nos ayuda a crecer como Iglesia. No estamos aislados, somos Pueblo de Dios: esta es la Iglesia".

"El Espíritu Santo con sus dones diseña la variedad que es la riqueza en la Iglesia...La Iglesia no es un entretejerse de cosas e intereses, sino el templo del Espíritu Santo, el templo en que Dios obra, del que cada uno de nosotros con el don del Bautismo es piedra viva".

El Santo Padre aseguró que "ninguno es inútil en la Iglesia, todos somos necesarios para construir este templo ninguno es secundario, ni más importante; todos somos iguales a los ojos de Dios. Alguno podría decir, escuche Señor Papa, Usted no es como nosotros. ¡No es verdad, soy como uno de vosotros, todos somos iguales!, somos hermanos, ninguno es anónimo: la Iglesia la construimos y la formamos todos. Pero este hecho nos invita también a reflexionar sobre el dato de que si falta el ladrillo de nuestra vidacristiana, falta algo de la belleza de la Iglesia".

Para concluir el Papa alentó a pedirle a Dios "su gracia y su fuerza para que podamos estar profundamente unidos a Cristo, piedra angular... de nuestra vida y de toda la vida de la Iglesia ... y para que, animados por el Espíritu Santo, seamos siempre piedras vivas de su Iglesia".

martes, 25 de junio de 2013

El Papa recibe a más 300 niños sin familia en la Estación de Ferrocarril del Vaticano

El Papa Francisco acudió a la Estación de Ferrocarril del Vaticano el pasado domingo por la mañana para recibir a más de 300 niños sin familia, quienes le llevaron dibujos y una gran sonrisa.

El encuentro formó parte de la iniciativa "El Tren de los niños, un viaje a través de la belleza", organizada por el Pontificio Consejo de la Cultura.

“¡Gracias. Qué hermoso! Os deseo un feliz día, que me parece será un poco caluroso… ¿No tenéis miedo del calor?”, preguntó el Papa. “¡No, por verte a ti no tenemos miedo!”. Éste es el diálogo que el Papa Francisco –radiante de alegría-, entabló con los cientos de niños, quienes lo rodearon con confianza para saludarlo, como si se tratase de un párroco más.

Los menores –en su mayoría de entre 6 y 10 años-, procedían de distintas casas de acogida del norte de Italia, y llegaron desde Milán en un tren de alta velocidad acompañados por Patricia Martínez, del Pontificio Consejo para la Cultura, y el representante de los Ferrocarriles del Estado Italiano, Mauro Moretti. En la estación junto al Papa, también esperaba el Cardenal Gianfranco Ravasi.

La iniciativa forma parte del Atrio de los Gentiles, una estructura querida por el Obispo Emérito de Roma, Benedicto XVI, para abrir el diálogo entre creyentes y no creyentes.

La iniciativa “está dirigida a los niños, en especial aquellos más pobres. Y los más pobres entre los pobres son los niños que no tienen familia, ya sea porque las familias están destruidas, o porque sus padres están en la cárcel, o porque son huérfanos, etcétera, así que hemos querido llevar a estos pobres de entre los pobres al Papa Francisco”, explicó a ACI Prensa el director ejecutivo del "Patio de los Gentiles", Padre Jean-Marie Laurent Mazas.

“La parte más bella del viaje ha sido ver la sonrisa de estos niños. Porque son niños con familias destruidas, con una sonrisa que nunca se había visto. Así que esta ha resultado ser una iniciativa realmente bonita”, añadió.

El Papa estuvo con los pequeños huéspedes por al menos media hora, les agradeció por su visita y quiso saber acerca de sus actividades en el Vaticano, que incluyeron un recorrido por el Aula Pablo VI y la Plaza de San Pedro. Al final del día, los jóvenes regresaron a Milán.

Sor María Irene, Hermana Misionera de la Caridad de Don Orione, llegó acompañada por 17 niños, “nuestro carisma es llevar a todos al Papa y a laIglesia, y por tanto ha sido para nosotros una alegría poder decir al Papa con nuestra propia presencia el que estamos aquí, te queremos, y caminamos contigo porque queremos ser el sol que calienta la Tierra, algo de que necesitamos realmente hoy día”, explicó a ACI Prensa.

Los niños ya estaban preparados desde hace algunos días para el encuentro, habían hecho una visita a la catedral de Milán, Florencia y Bolonia, y prepararon para el Papa unos dibujos de su experiencia. “Estaban realmente alegres”, refirió emocionada la religiosa.

¡Ninguno de nosotros es cristiano por pura casualidad!, exclama el Papa



Ser cristiano es una llamada de amor, una llamada a convertirse en hijos de Dios y nadie lo es "por pura casualidad", lo dijo hoy el Papa Francisco en la Misa en la Casa de Santa Marta. El Santo Padre enfatizó que la certeza del cristiano es que el Señor jamás abandona y pide seguir adelante en medio de las dificultades.

El Papa Francisco centró su homilía en la Primera Lectura, tomada del Libro del Génesis, donde se narra sobre la discusión entre Abraham y Lot por la repartición de la tierra. "Cuando leo esto pienso en Oriente Medio y pido mucho al Señor para que nos dé a todos la sabiduría, esta sabiduría – no discutamos, yo voy por esta parte, tú por la otra … - por la paz".

Abraham, resaltó Francisco, "continúa caminando". "Él dejó su tierra para ir, no sabía dónde, pero donde el Señor le dirá". Sigue caminando, entonces, porque cree en la Palabra de Dios que "lo había invitado a salir de su tierra". Este hombre, quizás nonagenario, mira la tierra que le indica el Señor y cree.

"Abraham parte de su tierra con una promesa: todo su camino es ir hacia esta promesa. Y su recorrido es también un modelo de nuestro recorrido. Dios llama a Abraham, una persona, y de esta persona hace un pueblo. Si vamos al Libro del Génesis, al inicio, a la Creación, podemos encontrar que Dios crea las estrellas, crea las plantas, crea los animales, crea las, los, las, los… Pero crea al hombre: el singular, uno".

"A nosotros Dios siempre nos habla en singular, porque nos ha creado a su imagen y semejanza. Y Dios nos habla en singular. Ha hablado a Abraham y le dio una promesa y lo invitó a salir de su tierra. Nosotros cristianos hemos sido llamados en singular: ¡ninguno de nosotros es cristiano por pura casualidad! ¡Ninguno!"

Existe una llamada "con nombre, con una promesa", dijo el Papa: "¡Ve adelante, Yo estoy contigo! Yo camino junto a ti". Y esto, continuó, lo sabía Jesús: "también en los momentos más difíciles se dirige al Padre":

"Dios nos acompaña, Dios nos llama por nombre, Dios nos promete una descendencia. Y esto es un poco la seguridad del cristiano. No es una casualidad, ¡es una llamada! Una llamada que nos hace ir hacia adelante. Ser cristiano es una llamada de amor, de amistad; una llamada a convertirme en hijo de Dios, hermano de Jesús; a volverme fecundo en la transmisión a los otros de esta llamada; a convertirme en instrumento de esta llamada. Hay tantos problemas, tantos problemas; hay momentos difíciles: ¡Jesús pasó tantos! Pero siempre con aquella seguridad: ‘El Señor me ha llamado. El Señor es como yo. El Señor me ha prometido’".

El Señor, reiteró el Papa, "es fiel, porque Èl jamás puede renegar de sí mismo: Es la fidelidad". Y pensando en este pasaje donde Abraham "es ungido padre, por primera vez, padre de los pueblos, pensamos también en nosotros que hemos sido ungidos en el Bautismo y pensamos a nuestra vida cristiana":

"Alguno dirá ‘Padre, soy pecador’… Pero todos lo somos. Eso se sabe. El problema es: pecadores, ir adelante con el Señor, ir adelante con aquella promesa que nos ha hecho, con aquella promesa de fecundidad y decir a los demás, contar a los otros que el Señor está con nosotros, que el Señor nos ha elegido y que Él no nos deja solos, ¡jamás! Aquella certeza del cristiano nos hará bien".

Para concluir el Papa hizo votos para "que el Señor nos dé, a todos nosotros, este deseo de ir adelante, que tuvo Abraham, en medio a los problemas; pero ir adelante, con aquella seguridad de saber que Él me ha llamado, que me ha prometido tantas cosas bellas ¡está conmigo!"

Destacan aporte teológico del Papa Francisco a encíclica que escribe con Benedicto XVI

El Cardenal de la Diócesis de Roma, Camilo Ruini, señaló que el aporte teológico del Papa Francisco a la Encíclica que escribe a partir de los trabajos de Benedicto XVI, mostrará “todo el valor existencial de la fe” como “verdad que opera a través de la caridad”.

“Creo que mostrará también todo el valor existencial de la fe, es decir, la fe no es una cosa abstracta o solo una suma de verdades, o una sola verdad central con las otras verdades como corolario. La fe es una verdad que opera a través de la caridad y que vive a través de la caridad y este aspecto será también muy subrayado por el Papa”, explicó el Cardenal Ruini en una entrevista concedida a ACI Prensa el 21 de junio.

El Cardenal Ruini consideró esta referencia a la fe que opera a través de la caridad, es lo que el Papa Francisco “ha subrayado ya en su predicación”.

El pasado 13 de junio, tres meses después de su elección como Obispo de Roma, el Papa Francisco anunció que terminaría la Encíclica sobre la fe que comenzó a escribir Benedicto XVI antes de su renuncia al Pontificado.

Aunque todavía se desconoce la fecha exacta de su publicación, se espera que el documento sea presentado dentro del Año de la Fe, que culminará el próximo 24 de noviembre con un gran evento en la Plaza de San Pedro.

Se sabe que el Papa Francisco proseguirá sus trabajos sobre la encíclica durante los próximos meses de julio y agosto, en los que intercalará su presencia en la Casa Santa Marta, la residencia de verano papal de Castel Gandolfo, y Río de Janeiro en Brasil, con motivo de la Jornada Mundial de la Juventud 2013.

Para ser Encíclica, el texto de Benedicto XVI debe ir firmado por el Papa Francisco, y son muchos en el Vaticano los que esperan con interés leer el texto, y esta inusual e histórica colaboración.

Por otro lado, el Papa Francisco podría estar trabajando también en otra encíclica, según publicó el Obispo de Molfetta-Ruvo-Giovinazzo-Terlizzi (Italia), Mons. Luigi Martella, estaría dedicada a los pobres y se titularía “Beati pauperes”, “Bienaventurados los pobres”, traducido del latín al español.

lunes, 24 de junio de 2013

Debemos vivir con amor y veneración a Jesús, dice el Papa

                                
Al celebrar la Misa en la Capilla de la Casa Santa Marta, a la que asistieron alrededor de cuarenta Nuncios Apostólicos, el Papa Francisco exhortó a vivir con “veneración y amor” por Jesús.

El Santo Padre recordó que en el Evangelio de hoy, el Señor le pregunta a los Apóstoles “¿y ustedes quién dicen que soy”, y señaló que es necesario responderle a Jesús con el corazón, inspirados por la veneración por Él y por la roca de su amor.

“’¿Quién dicen que soy yo?’ Una pregunta a la cual Pedro responde: ‘Tú eres el Cristo de Dios, el Ungido del Señor’, que también dos mil años después nos implica, que nos pone en crisis” y es una prueba “en nuestro camino de fe”.

El Papa indicó que la pregunta de Jesús está “dirigida al corazón”, y hay que responderla “con la humildad del pecador, más allá de las frases hechas o de conveniencia, que casi contiene otra, especular y también decisiva: “’¿Quién pensamos que es Jesús?’”.

“Nosotros, también nosotros, que somos apóstoles y siervos del Señor debemos responder, porque el Señor nos pregunta: ‘¿Qué cosa piensas tú de mí?’. Pero lo hace, ¡eh! ¡Lo hace tantas veces! ‘¿Qué cosa piensas tú de mí?’ dice el Señor”.

Francisco señaló que “nosotros no podemos hacer como aquellos que no entienden bien. ‘¡Pero tu eres el ungido! Sí, he leído’. Con Jesús no podemos hablar como con un personaje histórico, un personaje de la historia, ¿no? Jesús está vivo ante nosotros. Esta pregunta la hace una persona viva. Y nosotros debemos responder, pero con el corazón”.

El Santo Padre indicó que los católicos hoy también están llamados a realizar la elección radical hecha por los apóstoles, una elección total, en la lógica del “todo o nada”, un camino que se debe realizar y para el cual hay que estar iluminados por una “gracia especial”, vivir siempre sobre la sólida base de la veneración y del amor por Jesús.

“Veneración y amor por su Santo Nombre. Certeza de que Él nos ha establecido sobre una roca: la roca de su Amor. Y de este amor nosotros te damos la respuesta, damos la respuesta”.

El Papa indicó que “cuando Jesús hace estas preguntas – ‘¿Quién soy yo para ti?’ – hay que pensar en esto: yo estoy establecido sobre la roca de su amor. Él me guía. Debo responder firme sobre esa roca y bajo su guía”.

“’¿Quién soy yo para ustedes?’, nos pregunta Jesús. A veces se siente vergüenza de responder a esta pregunta, porque sabemos qué es lo que no va en nosotros, somos pecadores. Pero es precisamente éste el momento en el debemos confiar en su amor y responder con ese sentido de la verdad, tal como hizo Pedro en el Lago de Tiberíades, ‘Señor tú sabes todo’”.

Francisco señaló que “es precisamente en el momento en que nos sentimos pecadores, cuando el Señor nos ama tanto, y así como puso al pescador Pedro como jefe de su Iglesia, del mismo modo también con nosotros hará algo bueno”.

“¡Él es más grande! Y cuando nosotros decimos de la veneración y del amor, seguros, seguros sobre la roca del amor y bajo su guía: ‘Tú eres el ungido’, esto nos hará tanto bien y nos hará ir hacia delante con seguridad y nos hará tomar la Cruz cada día, que a veces es pesada”.

“Vayamos adelante así, con alegría, y pidiendo esta gracia: ¡dona a tu pueblo, Padre, vivir siempre en la veneración y en el amor por tu Santo Nombre! Y con la certeza de que ¡Tú jamás privas de tu guía a aquellos que has establecido sobre la roca de tu Amor! ¡Así sea!”, concluyó.

El Papa exhorta a servir sin pedir nada a cambio, como hizo Jesús


 Al recibir hoy poco antes del mediodía a los miembros de la Asociación de los Santos Pedro y Pablo, El Papa Francisco los felicitó por su labor de voluntariado y señaló que es “hermoso” el “servir sin pedir nada a cambio, como hizo Jesús. Jesús sirvió a todos y no pidió nada a cambio”.

Entre los miembros de la Asociación de los Santos Pedro y Pablo figuran profesionales, artesanos, estudiantes, maestros y empleados católicos, que viven en Roma y dedican un tiempo a iniciativas de voluntariado, dando testimonio de su vida cristiana, apostolado y fidelidad a la Sede Apostólica.

Francisco señaló que “es un signo distintivo del cristiano” particularmente “la caridad, la atención concreta hacia los demás, hacia los pobres, débiles y necesitados”.

“También tienen ustedes un intenso programa de formación para los candidatos y los jóvenes estudiantes que quieren participar en la vida de la Asociación. Crecer en el conocimiento y amor de Dios es esencial para llevar y para vivir su misericordia a todos, al ver en los rostros de las personas que encontramos el rostro de Cristo”.

El Papa señaló que “por todo esto, les quiero expresar mi reconocimiento y gratitud”.

“Esto es hermoso: servir sin pedir nada a cambio, como hizo Jesús. Jesús sirvió a todos y no pidió nada a cambio. Eso es bello: Jesús hizo las cosas con gratuidad y ustedes hacen las cosas con gratitud”.

El Santo Padre señaló que la recompensa “es ésta: ¡la alegría de servir al Señor, y hacerlo juntos!”.

“Conózcanlo cada vez más, con la oración, con los días de retiro, con la meditación de la Palabra, con el estudio del Catecismo, para amarlo siempre más y servirlo con un corazón generoso y grande, con magnanimidad”, concluyó.