jueves, 31 de mayo de 2012

El Papa pide acabar con minas antipersonales


 Al final de la audiencia general de este miércoles, el Papa Benedicto XVI hizo un llamado para proseguir en los esfuerzos que lleven a acabar con las minas antipersonales que generan "destrucción y muerte".
Luego de saludar en diversos idiomas a los peregrinos de todo el mundo en la Plaza de San Pedro, Benedicto XVI recordó que hoy se celebra la Jornada internacional para la sensibilización sobre el problema de las minas antipersonales.
En su exhortación el Papa expresó su cercanía a las víctimas y sus familias; y ha manifestado su apoyo "a todos los que se esfuerzan por liberar a la humanidad de estos terribles y engañosos explosivos".
El Santo Padre recordó finalmente las palabras de Juan Pablo II en ocasión de la entrada en vigor de la Convención sobre la prohibición del empleo de minas antipersonales, cuando el Papa Wojtyla dijo que estas minas impiden a los hombres "caminar juntos sobre los senderos de la vida sin temer insidias de destrucción y muerte".

Intenciones del Papa para junio: Reconocer a Cristo en la Eucaristía y anunciar el Evangelio


La intención general del Apostolado de la Oración del Papa Benedicto XVI es: "Para que los creyentes sepan reconocer en la Eucaristía la presencia viva del Resucitado, que les acompaña en la vida cotidiana".
Su intención misionera es: "Para que los cristianos en Europa redescubran la propia identidad y participen con mayor empeño en el anuncio del Evangelio".

lunes, 28 de mayo de 2012

EVANGELIO DE FIN DE SEMANA

¿ Señor, a quién iremos?. Tú tienes palabras de vida eterna. Jn 6, 68
domingo 27 Mayo 2012 Solemnidad de Pentecostés
Evangelio según San Juan 15,26-27.16,12-15.

Cuando venga el Paráclito que yo les enviaré desde el Padre, el Espíritu de la Verdad que proviene del Padre, él dará testimonio de mí. 
Y ustedes también dan testimonio, porque están conmigo desde el principio. 
Todavía tengo muchas cosas que decirles, pero ustedes no las pueden comprender ahora. 
Cuando venga el Espíritu de la Verdad, él los introducirá en toda la verdad, porque no hablará por sí mismo, sino que dirá lo que ha oído y les anunciará lo que irá sucediendo. 
El me glorificará, porque recibirá de lo mío y se lo anunciará a ustedes. 
Todo lo que es del Padre es mío. Por eso les digo: 'Recibirá de lo mío y se lo anunciará a ustedes'. Extraído de la Biblia, Libro del Pueblo de Dios. 

Leer el comentario del Evangelio por :San Ireneo de Lyon (v. 130-v. 208), obispo, teólogo y mártir Contra las herejías, III, 17, 2; SC 211 (trad. SC; cf breviario Pentecostés) 
«Pediré al Padre y os dará otro Defensor que estará siempre con vosotros»

El Señor dijo a los discípulos: Id y haced discípulos de todos los pueblos, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo (Mt 28,19). Con este mandato, les daba el poder de regenerar a los hombres en Dios. Dios había prometido por boca de sus profetas que en los últimos días derramaría su Espíritu sobre sus siervos y siervas, y que éstos profetizarían... Así el Señor prometió a la Samaritana «un agua viva», «para que nunca más tuviera sed» y no se viera obligada a sacar agua con dificultad ya q ella misma poseía un agua «que brotaba hasta la vida eterna» (Jn 4,10-14). Se trata de poder beber lo que el Señor ha recibido de su Padre, y que a su regreso da a los que esperan en él, enviando el Espíritu Santo sobre toda la tierra... 
Gedeón había profetizado que se extendería el rocío sobre toda la tierra, que es el Espíritu de Dios. Es precisamente este Espíritu el que descendió sobre el Señor: «Espíritu de prudencia y sabiduría, Espíritu de consejo y valentía, Espíritu de ciencia y temor del Señor» (Is 11,2-3). El Señor, a su vez, lo dio a la Iglesia, enviando al Defensor sobre toda la tierra desde el cielo, que fue de donde dijo el Señor que había sido arrojado Satanás como un rayo (Lc 10,18); por esto necesitamos de este rocío divino, para que demos fruto y no seamos lanzados al fuego; y ya que tenemos quien nos acusa (Ap 12,10), tengamos también un Defensor, pues que el Señor encomienda al Espíritu Santo el cuidado del hombre, posesión suya, que había caído en manos de ladrones (Lc 10,30), del cual se compadeció, y vendó sus heridas, entregando después los dos denarios regios para que nosotros, recibiendo por el Espíritu «la imagen y la inscripción» (Lc 20,23) del Padre y del Hijo, hagamos fructificar el denario que se nos ha confiado, retornándolo al Señor con intereses (cf Mt 25,14s). 


domingo, 20 de mayo de 2012

EVANGELIO DE FIN DE SEMANA.

¿ Señor, a quién iremos?. Tú tienes palabras de vida eterna. Jn 6, 68

domingo 20 Mayo 2012
Evangelio según San Marcos 16,15-20.
Entonces les dijo: "Vayan por todo el mundo, anuncien la Buena Noticia a toda la creación. El que crea y se bautice, se salvará. El que no crea, se condenará. Y estos prodigios acompañarán a los que crean: arrojarán a los demonios en mi Nombre y hablarán nuevas lenguas; podrán tomar a las serpientes con sus manos, y si beben un veneno mortal no les hará ningún daño; impondrán las manos sobre los enfermos y los curarán". 
Después de decirles esto, el Señor Jesús fue llevado al cielo y está sentado a la derecha de Dios. 
Ellos fueron a predicar por todas partes, y el Señor los asistía y confirmaba su palabra con los milagros que la acompañaban. 
Extraído de la Biblia, Libro del Pueblo de Dios. 
Leer el comentario del Evangelio por : Juan Taulero (v. 1300-1361), dominico en Estrasbourgo Sermón 20, 3º para la Ascensión 
«Para ir donde me voy, ya sabéis el camino»
"El Señor Jesús, después de haberles, ascendió al cielo "... Los miembros del Cuerpo de Cristo deben seguir a su maestro, su cabeza, que ascendió hoy. Nos precedió, para prepararnos un sitio (Jn 14,2), a nosotros que lo seguimos, de modo que pudiéramos decir con la novia del Cantar de los Cantares: "Correremos en pos de ti" (1,4)...
¿Queremos seguirlo? Debemos también considerar el camino que nos mostró durante treinta y tres años: camino de pobreza y de indigencia, a veces muy amargo. Debemos seguir completamente el mismo camino si queremos ascender, con él, por encima de los cielos. Aunque todos los maestros hayan muerto y todos los libros quemados, encontraremos siempre, en su vida santa, una enseñanza suficiente, porque él mismo es el camino y no otro (Jn 14,6). Sigamoslo pues.
De la misma manera que el imán atrae el hierro, así Cristo misericordioso, atrae todos los corazones que ha tocado. El hierro atraído por la fuerza del imán se levanta por encima de su ser natural, pasa por encima, aunque esto sea contrario a su naturaleza. No se detiene hasta que él mismo se haya elevado. Así es como todos aquellos que son atraídos en el fondo de su corazón por Cristo, no retienen más la alegría ni el sufrimiento. Ascienden hasta él...
Cuando no se es atraido, no hay que imputárselo a Dios. Dios toca, empuja, advierte y desea por igual a todos los hombres, quiere por igual a todos los hombres, pero su acción, su advertencia y sus dones son recibidos y aceptados de un modo muy desigual... Amamos y buscamos otra cosa distinta a él, he aquí porque los dones que Dios ofrece sin cesar a cada hombre quedan a veces inútiles... Podemos salir de este estado de alma sólo con un celo valiente y decidido y con una oración muy sincera, interior y perseverante.

domingo, 13 de mayo de 2012

EVANGELIO DE FIN DE SEMANA ( 13/5/12) " AMARNOS LOS UNOS A LOS OTROS COMO EL NOS AMÓ".

EVANGELIO, Juan 15, 9- 17


" Como el Padre me ha amado, así también yo os he amado; permaneced en mi amor. Si guardareis mis mandamientos, permaneceréis en mi amor; así como yo he guardado los mandamientos de mi Padre, y permanezco en su amor. Estas cosas os he hablado, para que mi gozo esté en vosotros, y vuestro gozo sea cumplido. Este es mi mandamiento: Que os améis unos a otros, como yo os he amado. Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos.  Vosotros sois mis amigos, si hacéis lo que yo os mando. Ya no os llamaré siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su señor; pero os he llamado amigos, porque todas las cosas que oí de mi Padre, os las he dado a conocer. No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os elegí a vosotros, y os he puesto para que vayáis y llevéis fruto, y vuestro fruto permanezca; para que todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, él os lo dé. Esto os mando: Que os améis unos a otros".


Podemos decir que el tema principal del Evangelio es el AMOR, pero hablamos del amor como fruto de la vida cristiana, ya que si leemos atentamente la Palabra veremos que el mismo Jesus repite 9 veces la palabra amor, pero si leemos la 1ra carta de juan en su cap 4 vers. 7 al10 El también nombra 9 veces la palabra amor, es decir, que entre Jesus y Juan tenemos 18 veces la palabra amor, que significa esto? ellos quieren que nos quede bien el claro que el amor es la vida, la actitud del cristiano, aún en el dolor, en lo negativo, en el desengaño. momentos difíciles... 
pero nos cabe preguntarnos ¿ el amor de Dios ? primeramente, no es como el amor humano y es lo 1ro que debemos considerar como personas que amamos y necesitamos ser amadas. y con seguridad podemos decir que Dios nos ama infinitamente porque somos la obra de su amor, sus hijos, aunque nos cueste creer. El por amor nos creó, y por amor vinimos a la vida. El, el Dios de la vida,nos creó para vivir y ser felices. También, nos ama personalmente y concreto, porque te ama con tus virtudes, tus defectos, tus limitaciones, tus diferencias, como sos, por eso decimos que su amor es, nos ama con un solo y único amor, y que nos da un amor de padre y ese amor lo lleva a sentir ternura por cada uno, por ti. Nos ama con el amor de madre por su ternura y fidelidad. Su amor de pastor también se releja al vivir con nosotros, al cuidarnos de los lobos ( todo lo malo) al alimentarnos, al sanar nuestras heridas, enfermedades, al buscarnos cuando nos salimos de su rebaño.
Digamos abiertamente que Dios me ama personalmente y quiere lo mejor para mi, me ama tal como soy, sin condiciones, El con amor eterno nos ha amado, te ha amado, y nunca su amor se separará de tú lado, de nuestro lado.
Ahora, pregúntate: el amor que das, que te dieron es igual?.
Volviendo al Evangelio, Jesus con la palabra " COMO" nos quiere significar que el amor del Padre y del Hijo está en los discípulos, y por ende hoy en nosotros, en vos. Pero El hace un petitorio y es: " PERMANEZCAN EN MI AMOR" , nos pide quedarnos a su lado, en EL,en su amor. La pregunta que nos hacemos ante ese petitorio es: cómo se permanece en su amor?.La respuesta sería: solo se permanece, se logra estar en su amor cumpliendo su mandamientos, , siendo obedientes a los mismos y por su puesto seguir ese camino. Dios desde su amor misericordioso lo resume en AMAR, y queda claro que quien no esté dispuesto a amar, no puede permanecer en el amor de Jesús, por lo tanto, no es ni será cristiano.
Otra palabra interesante de tocar es Gozo, en el amor, su amor, está nuestra, tú alegría perfecta, completa, no en lo que te ofrece el mundo. el hombre. Porque el amor es una entrega, es dar la vida, es darlo todo por aquellos a quienes amo y yo agregaría no amo o no me aman. si hablamos de dar la vida, una pregunta más: que es la vida? de hacho es un don, un bien supremo, bien que no se puede perder, sin ella no existo, no estoy, nos lleva a estar, a que estés bien o mal,
a decir " Yo soy". siguiendo con las palabra, observamos que 
Jesús llama amigos y no servidores a sus discípulos, que palabra he!!! con ese titulo, ellos realizan un salto cualitativo, dónde pasan a ser hermanos de Jesús, nosotros. Vos llamas hermanos a tu amigo/a, verdad? ellos son el centro de la vida afectiva de Jesús. y como buen amigo Jesús no les oculta nada. 
En todo esto hay una misión, cual es? la de dar frutos de amor.
Que en este fin de semana y en la que entra comiences, comencemos a experimentar el amor de Dios para amar como EL. Que recordemos que el nos pide que nos amemos y no que nos amasemos. bendicones....

lunes, 7 de mayo de 2012

Constante referencia a Cristo para servir bien a la Iglesia, alienta el Papa Benedicto


Con ocasión del juramento de los nuevos soldados de la Guardia Suiza del Vaticano, el Papa Benedicto XVI les explicó que el secreto de la eficacia de su trabajo, al servicio de la Iglesia y el Santo Padre, está en la constante referencia a Cristo.
En la Sala Clementina del Palacio Apostólico del Vaticano, el Santo Padre recibió esta mañana en audiencia a los 26 nuevos soldados que juraron ayer fidelidad a la defensa del Sumo Pontífice y la Curia Romana al ingresar al cuerpo de la Guardia Suiza.
A ellos les dijo que "el secreto de la eficacia de vuestro trabajo aquí en el Vaticano, como también de cada uno de vuestros proyectos es, por tanto, la constante referencia a Cristo. Este es el testimonio de muchos de vuestros antecesores, que se distinguieron no solo en el desarrollo de vuestro trabajo, sino también en el compromiso de la vida cristiana".
De vuestro compañeros, continuó el Pontífice, "algunos fueron llamados a seguir al Señor en la vida del sacerdocio y la vida consagrada, y respondieron a tiempo y con entusiasmo. Otros en cambio, coronaron felizmente el sacramento del Matrimonio con su vocación conyugal".
"Doy gracias a Dios, fuente de todo bien, por los diversos dones y las varias misiones que Él os confía, y rezo para que también vosotros, que empezáis vuestro servicio, podáis responder plenamente a la llamada de Cristo siguiéndolo con fe y generosidad".
El Papa recordó luego que "las funciones que desarrolla la Guardia Suiza constituyen un directo servicio al Sumo Pontífice y a la Sede Apostólica. Es por tanto motivo de viva apreciación el hecho de que los jóvenes elijan consagrar algunos años de su existencia en total disponibilidad al Sucesor de Pedro y a sus colaboradores".
El Santo Padre indicó que el singular servicio de la Guardia Suiza no puede cumplirse sin aquellas características que distinguen al Cuerpo: "firmeza en la fe católica, fidelidad y amor hacia la Iglesia de Jesucristo, diligencia y perseverancia en las pequeñas y grandes tareas cotidianas, coraje y humildad, altruismo y disponibilidad".
"De estas virtudes debe estar colmado vuestro corazón cuando prestáis el servicio de honor y de seguridad en el Vaticano", añadió.
Seguidamente dijo que "en las Sagradas Escrituras, el llamar al amor del prójimo está ligado al mandamiento de amar a Dios con todo el corazón, con toda el alma y con todas las fuerzas. Para dar amor a los hermanos es necesario formarse en la forja de la caridad divina, gracias a periodos prolongados de oración, a la constante escucha de la Palabra de Dios, y a una existencia totalmente centrada en el misterio de la Eucaristía".
"¡Queridos amigos! Aprovechad el tiempo que transcurrís aquí en Roma, para crecer en la amistad con Cristo, para amar cada vez más a su Iglesia, y para caminar hacia la meta de cada verdadera vida cristiana: la santidad", animó.
"Que os ayude la Virgen María, que honoramos de modo especial en el mes de mayo, para experimentar cada día más aquella comunión profunda con Dios, que para nosotros los creyentes empieza sobre la tierra y será completada en el Cielo", dijo luego.
"En efecto estamos llamados como recuerda San Pablo a ser ‘conciudadanos de los Santos y familiares de Dios’", y con estos sentimientos "os aseguro mi constante recuerdo en la oración y de corazón imparto a cada uno de vosotros la Bendición Apostólica", concluyó.
La Guardia Suiza Pontificia fue fundada por Julio II en 1506 como un Cuerpo estable, que dependía directamente de la Santa Sede y cuya misión principal era defender la persona del Papa y el palacio apostólico.
Para formar parte de la Guardia Suiza es necesario ser católico, varón de edad inferior a los 30 años, soltero, de altura superior a 1,74 y tener título de escuela superior o diploma de formación profesional. Los candidatos deben haber estudiado en la escuela militar suiza. Tienen que vivir en el Vaticano y sirven un mínimo de dos años.
Los santos patronos de la Guardia Suiza Pontificia son: San Martín, San Sebastián y San Nicolás von Flue, "defensor de la paz y padre de Suiza".

EVANGELIO DE FIN DE SEMANA ( 6/5/12) " PERMANECER Y DAR FRUTOS"

Siempre nos hemos preguntado quien es Jesús. Y la pregunta sería, quien es Jesús para mi?...... pero también, sabemos que desde la creación Dios representa la vida de cada uno como un árbol. Puso el árbol de la vida.
El domingo pasado Jesús nos mostró su imagen de buen pastor. Se presentó como el buen pastor. Hoy también quiere presentarse como algo, veamos como se define:

EVANGELIO DE JUAN; 15,1-8

"Yo soy la vid verdadera, y mi Padre es el viñador. Todo sarmiento que en mí no da fruto, lo corta, y todo el que da fruto, lo limpia, para que dé más fruto. Vosotros estáis ya limpios gracias a la Palabra que os he anunciado. Permaneced en mí, como yo en vosotros. Lo mismo que el sarmiento no puede dar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid; así tampoco vosotros si no permanecéis en mí. Yo soy la vid; vosotros los sarmientos. El que permanece en mí y yo en él, ése da mucho fruto; porque separados de mí no podéis hacer nada. Si alguno no permanece en mí, es arrojado fuera, como el sarmiento, y se seca; luego los recogen, los echan al fuego y arden. Si permanecéis en mí, y mis palabras permanecen en vosotros, pedid lo que queráis y lo conseguiréis. La gloria de mi Padre está en que deis mucho fruto, y seáis mis discípulos".

Podemos decir que Jesús se toma del mundo rural para mostrarse, dar una i
magen de si. Pero también diremos que El es fruto de arrepentimiento para quien se arrepiente. También habla de una vida de frutos, y para lograr dar frutos debemos en primer lugar estar limpios, y en verdad lo estamos, porque EL lo dijo, lo estamos por la palabra. Segundo, debemos permanecer en EL, para producir frutos, para hacer, porque por más que estudiemos, por más que tengamos riquezas, tengamos habilidades, elocuencia, sin EL nada podemos hacer o producir. Por último, tomamos en cuenta la obediencia, que consiste en cumplir con lo que nos pide. En cumplir con lo que nos pide está el amor y estamos con EL, por consiguiente, si lo amamos guardamos sus mandamientos. Sin estas tres condiciones somos plantados en tierras desérticas.
Los buenos frutos brotan de un árbol plantado junto a las corrientes de aguas, y da a su debido tiempo, donde sus hojas no caen y lo que hace prospera. Si vamos a los malos frutos diremos que son aquellos que son arrebatados por el viento, con ramas frágil, débiles.
El permanecer en Cristo consiste en que no haya pecado conocido sin juzgar, sin confesar. Que no haya intereses de lo que EL no sea parte. Que no haya vida que El no pueda compartir. Por lo tanto, quien permanece en El deja en El todas sus cargas; obtiene de El sabiduría, vida, fuerza. Entonces permanecer en El es permitir que nada en la vida nos separe de El.
Si hablamos de muchos frutos estos son llevados y el Padre es glorificado en nosotros. Llegamos a ser verdadera huertas de Dios y para serlo debemos ver el fruto y ese fruto está en la persona que se convierte, el que muestra un carácter cristiano que solo es alcanzado viviendo los frutos del Espíritu Santo, que son. Paz, gozo, amor, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza. y por último la conducta, que viene del fruto de justicia.
En nuestra vida tenemos maneras de llevar frutos. Y Para ello hablamos de falta de frutos, cuando no llevamos frutos. Hablamos solamente de frutos a secas y nos queda hacer alusión a más frutos y muchos frutos. Sin olvidar el ser fruto permanente. ¿En cual estamos?
Dios espera ver los frutos en nosotros, que serán llevados a su mesa para sus invitados. Quiere que permanezcamos en El por las gracias de su Espíritu que nos regala sus frutos.
Dejemos que nos riegue con su agua viva para ser árboles frondosos y verdes.
El dice: “YO SOY” con autoridad, poder y convicción. Dios el labrador es el que hace que la vid produzca frutos “espirituales”. Jesús es la vid, es decir, el fruto. Solo dan frutos las ramas unidas a la vid. Cada uno somos esas ramas que debemos permanecer unidos a El para dar frutos en abundancia.
“PERMANECED EN MI” dijo, y solo lo logramos, permanecemos en El en la Palabra, en la oración y estamos limpios por la gracia del Espíritu Santo.
Dios- Padre es el labrador que cosechará los frutos que espera de cada uno. Y damos frutos en el servicio cristiano.
El fruto es algo realmente bueno, es lo que puede soportar la mirada de Dios y es agradable para El; es ser semejantes a Cristo tanto en carácter, como en conducta. Pero solo la Palabra y la oración nos llevarán a dar el fruto que Dios espera.
Como Iglesia solo unidos a El y entre nosotros, tendremos vida, la vida de Jesús que es la savia que corre por nosotros, sus ramas.

miércoles, 2 de mayo de 2012

Benedicto XVI: Sean fieles a Dios como Beato Juan Pablo II


 El Papa Benedicto XVI recordó hoy al Beato Juan Pablo II al celebrarse el primer aniversario de su beatificación en la Plaza de San Pedro el 1 de mayo de 2011.
Al final de la audiencia general de hoy y ante unos 20 mil fieles presentes en la Plaza de San Pedro, el Papa saludó en su lengua a los peregrinos polacos y les dijo que "me alegro por su numerosa presencia en Roma en ocasión del primer aniversario de la beatificación de Juan Pablo II".
El Santo Padre resaltó luego del Papa Wojtyla que "el testimonio de su vida, su enseñanza y el amor por la patria permanecen en vuestra particular heredad".
"Reforzados por su intercesión, sean fieles a Dios, a la Cruz y al Santo Evangelio. Os bendigo de corazón. Alabado sea Jesucristo", concluyó.
El 1 de mayo de 2011, en la Beatificación de Juan Pablo II que presidió el PapaBenedicto XVI, más de un millón de personas colmaron la Plaza de San Pedro, la Vía de la Conciliación y las calles cercanas, entre ellos miles de polacos.
El milagro que permitió la beatificación del Papa Wojtyla fue la curación de la enfermedad del Parkinson de la religiosa francesa Marie Simon Pierre, que estuvo presente en la ceremonia y que acompañó la presentación de la reliquia del Pontífice.

Benedicto XVI: Como mártir San Esteban, rezar para entender el presente


El Papa Benedicto XVI alentó esta mañana a rezar como San Esteban –el primer mártir de laIglesia Católica que murió lapidado– para tener la luz necesaria que permite entender el presente y descubrir la acción de Dios en la historia.
Ante unas 20 mil personas en la Plaza de San Pedro y hablando en español, el Santo Padre señaló que "en la catequesis de hoy volvemos a contemplar cómo en la oración, la lectura y meditación de la Sagrada Escritura nos conducen a la escucha de Dios que nos habla, dándonos luz para entender el presente".
"Así, al reflexionar sobre el ejemplo de oración de San Esteban, podemos ver cómo el primer mártir, delante del tribunal que le condena, hace esa lectura y meditación, explicando la historia de la salvación, narrada en la Biblia, desde la luz de Cristo, para demostrar que en Él se cumplen las profecías antiguas y se inaugura un nuevo culto, que sustituye a los antiguos sacrificios por el ofrecimiento de sí mismo en la cruz".
El Papa dijo luego que "al ser llevado al suplicio, Esteban se hace uno con el Señor, y su reflexión sobre la Escritura se convierte en participación con la oración de Jesús en su agonía, de modo que, movido por el Espíritu Santo, puede hacer suyas las palabras que Cristo pronunció desde la cruz, dirigiéndolas ahora al Señor Resucitado, que se le presenta glorificado a la derecha del Padre".
"En nuestra oración estamos llamados también a descubrir la acción de Dios en la historia, que tiene su culmen en Cristo y a confesarlo como Señor de nuestras vidas", concluyó.
En su catequesis en italiano, el Papa recordó que Esteban fue llevado ante el Sanedrín, acusado de haber declarado que Jesús destruiría el templo y subvertiría las costumbres legadas por Moisés.
Ahora bien, en su discurso ante el tribunal, el santo afirma que Jesús se refería a su cuerpo, que es el nuevo templo. De esta forma, Cristo "inaugura el nuevo culto, y con la ofrenda de sí mismo en la Cruz, reemplaza los sacrificios antiguos".
Esteban quiere demostrar que la acusación de subvertir la ley de Moisés es infundada y para ello ilustra su visión de la historia de la salvación, de la alianza entre Dios y el hombre. "Relee así toda la narración bíblica, el itinerario de la Sagrada Escritura, para demostrar que conduce al lugar de la presencia definitiva de Dios, que es Jesucristo, especialmente en su Pasión, Muerte yResurrección. En esta perspectiva (...) también lee su condición de discípulo de Jesús, siguiéndolo hasta el martirio. La meditación sobre la Sagrada Escritura le permite entender (...) el presente".
La vida y el discurso de Esteban se interrumpen repentinamente con la lapidación, pero "precisamente el martirio es el cumplimiento de su vida y de su mensaje: se hace uno con Cristo. Así, su reflexión sobre la acción de Dios en la historia, sobre la Palabra divina que en Jesús ha llegado a su plenitud, se convierte en participación en la misma oración de la Cruz".
En el momento del martirio del Santo, afirmó el Papa, "se manifiesta una vez más la fecunda relación entre la Palabra de Dios y la oración".
Pero: "¿De dónde sacó el primer mártir cristiano la fuerza para hacer frente a sus perseguidores y llegar hasta la entrega de sí mismo? La respuesta es simple: de su relación con Dios, de su comunión con Cristo, de la meditación sobre la historia de la salvación, de ver la acción de Dios, que alcanza su cumbre en Jesucristo".
San Esteban cree que Jesús "es el templo 'no construido por mano de hombre' en que la presencia de Dios Padre se ha hecho tan cercana como para entrar en nuestra carne humana para llevarnos a Dios, para abrir las puertas delCielo".
"Nuestra oración, entonces, debe consistir en la contemplación de Jesús a la diestra de Dios, de Jesús como Señor de nuestra vida cotidiana. En Él, bajo la guía del Espíritu Santo, también nosotros podemos dirigirnos a Dios (...) con la confianza y el abandono de los hijos que acuden a un Padre que los ama infinitamente", concluyó.