El secretario del Consejo Pontificio para los Migrantes e Itinerantes, monseñor Agostino Marchetto, se posicionó hoy en contra de la decisión tomada por el Gobierno francés, que hoy empezó a expulsar del país a los gitanos procedentes de Europa del Este.
"No se pueden tomar decisiones contra enteras comunidades sin la aplicación a cada individuo en particular en función del orden público", afirmó el prelado en declaraciones a la Rai, la radio pública italiana.
Marchetto se remitió a "lo establecido por la misma legislación europea" y añadió que, además, la decisión tomada por el Gobierno de París también está en contra de la ley francesa, la cual "prevé que los municipios con más de 5.000 habitantes deben instituir campamentos" para los gitanos. Por último, el representante vaticano consideró que la medida no respeta el principio de proporcionalidad.
Precisamente mañana, el santuario francés de Lourdes acogerá la peregrinación de gitanos y pueblos nómadas que cada año se celebra en este lugar. Los organizadores esperan el arribo de alrededor de 8.000 gitanos procedentes de distintos países.
La celebración coincide con las primeras expulsiones de gitanos que el Gobierno de Nicolas Sarkozy está llevando a cabo con el objetivo de incrementar la seguridad ciudadana.
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