El secretario general de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Juan Antonio Martínez Camino, aseguró hoy que el ex jefe de la Casa Real, Sabino Fernández Campo --fallecido ayer en Madrid--, "creía profundamente en Jesucristo y no se avergonzaba de su fe". "Fernández Campo vivía con la conciencia clara de estar en camino hacia la vida eterna", precisó.
El obispo auxiliar de Madrid presidió hoy la Eucaristía por Sabino Fernández Campo en el tanatorio La Paz de Tres Cantos (Madrid), en sustitución del cardenal arzobispo de Madrid, Antonio María Rouco Varela, quien se encuentra de viaje oficial en Roma.
Durante la homilía, destacó el carácter "cabal" y el "amor por la verdad" del que ex consejero particular del Rey Juan Carlos. "Don Sabino era un hombre cabal, verdadero, amante de la verdad --aseguró--. Y eso se veía en lo que decía sobre su esperanza y sobre su temor: 'Temo el juicio de Dios, que ha de ser riguroso. Pero también confío en su generosidad y misericordia, porque el perdón manifiesta la grandeza de quien perdona".
En un comunicado, el Secretario general de la CEE recordó que "ahora es el momento de la oración y del recuerdo agradecido por la vida de Don Sabino". Según Martínez Camino, "hoy son muchos, por no decir todos, los españoles que notan un hueco" en su interior.
En la Eucaristía, que comenzó a las siete de la tarde, estuvieron presentes los familiares y amigos más cercanos del fallecido, además de los Reyes de España, don Juan Carlos y doña Sofía; los Príncipes de Asturias, don Felipe y doña Letizia, y la Infantas Elena y Cristina, así como diversas personalidades del mundo de la política y la justicia.
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